El sector del car-sharing en Estados Unidos ha sufrido un duro golpe con el reciente anuncio del cierre de las operaciones de Getaround en el país. Esta noticia, que llega tras una serie de despidos y una reestructuración significativa, marca un punto de inflexión para la compañía, que alguna vez fue una de las favoritas de los inversores. La decisión impacta directamente en sus usuarios y empleados, y plantea interrogantes sobre el futuro del modelo de negocio de alquiler de vehículos entre particulares. Exploraremos las razones detrás de este cierre, su impacto en el mercado, y los planes futuros de la empresa, que ahora centra sus esfuerzos en el mercado europeo.
Cierre de Operaciones de Getaround en EE.UU.: Un Análisis Detallado
El Fin de una Era en el Car-Sharing Estadounidense
Getaround, la empresa de car-sharing que permitía a los propietarios alquilar sus coches, camiones y SUVs a otros usuarios, ha anunciado el cierre de sus operaciones en Estados Unidos. Esta decisión se produce aproximadamente un año después de haber despedido al 30% de su fuerza laboral en Norteamérica como parte de una reestructuración interna. La adquisición de HyreCar en 2023, por valor de 9.45 millones de dólares, también se ve afectada, ya que este negocio también cesará sus actividades.
Motivos Detrás del Cierre: Un Problema de Liquidez
En un comunicado oficial, Getaround atribuyó el cierre a una persistente falta de liquidez, a pesar de las mejoras en la rentabilidad y los extensos esfuerzos de reestructuración. La compañía, que fue fundada en 2009 en San Francisco, había logrado levantar más de 750 millones de dólares de inversores de alto perfil, incluyendo una ronda de 300 millones liderada por Softbank Vision Fund en 2018. Sin embargo, estos fondos no fueron suficientes para mantener a flote las operaciones en EE.UU.
Transición a Europa: El Nuevo Enfoque de Getaround
La compañía ha anunciado que se centrará en su negocio europeo, donde opera en seis países: Noruega, España, Francia, Alemania, Bélgica y Austria. Esta decisión estratégica busca consolidar su presencia en un mercado donde aparentemente ha encontrado mayor estabilidad y rentabilidad. Getaround ha instado a sus clientes estadounidenses a devolver los vehículos alquilados antes de una fecha límite, advirtiendo sobre posibles problemas de cobertura de seguro.
El Impacto en Clientes y Empleados
El cierre de Getaround en Estados Unidos ha generado incertidumbre y confusión entre sus clientes. La empresa ha cancelado todos los alquileres futuros y ha solicitado la devolución inmediata de los vehículos. Además, todos los empleados en Estados Unidos serán despedidos, marcando un final abrupto para sus carreras en la compañía. La mayoría de estos empleados terminarán su relación laboral el 14 de febrero, mientras que un grupo reducido se encargará de cerrar las operaciones.
Un Final Anunciado: Del Éxito a la Crisis
La historia de Getaround es un claro ejemplo de una empresa que pasó del éxito a la crisis en un corto período de tiempo. Tras una exitosa ronda de financiación y la adquisición de empresas como Drivy y Nabobil, la compañía salió a bolsa en 2022. Sin embargo, poco después recibió una advertencia de exclusión de la Bolsa de Nueva York y se vio obligada a realizar despidos masivos en 2023 y 2024. La falta de liquidez finalmente selló el destino de sus operaciones en Estados Unidos.
El cierre de las operaciones de Getaround en Estados Unidos marca el fin de una etapa en el sector del car-sharing. Aunque la compañía se centra ahora en Europa, su experiencia sirve como advertencia sobre los desafíos de un mercado competitivo y la importancia de mantener una sólida base financiera. El futuro del car-sharing en Estados Unidos queda ahora en manos de otras empresas que deberán aprender de los errores de Getaround para evitar un destino similar. La decisión de Getaround de liquidar sus operaciones en EEUU, despidiendo a todos sus empleados en EEUU, es una clara advertencia de los riesgos de un negocio desafiante y de la importancia de mantener una base financiera sólida. La compañía estima que incurrirá en cargos de entre $1.5 millones y $2 millones en relación con la reducción de personal.